Durante los últimos años mi curiosidad hacia la biomecánica y la neurociencia ha ido en aumento, ya que como profesional del ejercicio, entiendo que debo conocer, en mayor o menor medida para entender el funcionamiento del cuerpo antes de ponerlo en movimiento. Asistí a un par de cursos de “Activación Muscular” y me certifiqué en “Mapping Training”. Intentaré explicar en qué consiste este último y como puede ayudarnos a nivel deportivo.

Empezaré afirmando que todo movimiento está gobernado por el sistema nervioso, es decir, desde coger un vaso de agua hasta hacer un gesto técnico deportivo: un curl de bíceps con mancuerna, un pedaleo en ciclismo, una brazada en natación, un directo en boxeo…todo, absolutamente todo, está organizado por el sistema nervioso. Antes de realizar cualquier movimiento, éste es originado, procesado y ejecutado por y desde este sistema. Si éste no goza de buena salud, el movimiento que ejecuta tampoco.

Tenemos por una parte el cuerpo físico y por otra parte el cuerpo virtual, donde ese cuerpo físico está representado por mapas: varios mapas cerebrales:  motor, propioceptivo, memoria, visual, esquema corporal… de esta manera, si nuestros mapas están “nítidos” podremos mover y percibir esa área con precisión. Por el contrario si los mapas están “borrosos”, la manera en la que movemos y percibimos esa zona no será la adecuada, afectando al modo en que nos movemos, al modo en el que nuestro sistema nervioso organiza el movimiento, produciendo alteraciones a nivel motor y dolor.

Pero, ¿Qué puede hacer que nuestros mapas estén borrosos?. Los “brain maps” se pueden reorganizar de manera negativa por varios motivos: la inflamación (ya sea por una lesión o por movimientos repetitivos con cierta intensidad) la falta de uso de algunos mapas y la fatiga (el llamado “fallo muscular” altera la salud de los mapas de manera negativa). Pondré un ejemplo: Álex acude al gimnasio para estar en forma y hace unos cuantos ejercicios con pesos. Si llegase a la fatiga o “fallo muscular” estaría afectando negativamente a sus mapas, haciendo que sean borrosos y se traduzca en movimientos menos eficaces en un futuro. Por otro lado, está Susana que practica skate y acaba de recuperarse de un esguince de tobillo. La inflamación que ha sufrido ha desconfigurado sus mapas, necesita remapearlos para volver a moverse de manera precisa y económica. Incluso sería capaz de no haber perdido tanta masa muscular durante la inmovilización con el llamado “Imagery training”; un entrenamiento imaginado durante el reposo, que estimularía esas áreas a nivel virtual aunque estuviesen quietas a nivel físico. ¿Habéis oído hablar de miembros fantasma? Carlos practicando escalada sufrió un accidente en el que perdió una pierna. En ocasiones le duele esa pierna….pero ¿cómo es posible? Pues porque ese miembro sigue vivo a nivel virtual, en el cerebro. El poder del cerebro no tiene límites, y sólo acabamos de empezar a descubrirlo.

Artículo publicado en el Diario de Ibiza